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Cómo proteger tu ropa de algodón en los lavados.
El encogimiento es un problema común que puede afectar a cualquier prenda de algodón, pero hay formas de minimizar su impacto.

¿Alguna vez has experimentado la frustración de ver cómo tu remera favorita de algodón se encoge o achica después de un lavado? No estás solo. El encogimiento es un problema común que puede afectar a cualquier prenda de algodón, pero hay formas de evitarlo o minimizar su impacto. En este artículo, exploraremos los secretos para mantener tu ropa de algodón en su tamaño original después del lavado.
Entendiendo el encogimiento
Antes de profundizar en las soluciones, es importante entender por qué sucede el encogimiento. El algodón es una fibra natural que se puede encoger cuando se expone a agua caliente, detergentes agresivos o ciclos de lavado intensos. Esto se debe a que las fibras de algodón se contraen y se enredan entre sí, lo que provoca que la prenda se encoja o achique.
Consejos para evitar el encogimiento
- Lava en agua fría: El agua caliente es uno de los principales culpables del encogimiento. Lavar tu ropa de algodón en agua fría puede ayudar a prevenir el encogimiento. Si es posible, elige un ciclo de lavado en frío o utiliza agua tibia.
- Utiliza un detergente o jabón suave: Los detergentes o jabones agresivos pueden dañar las fibras de algodón y provocar encogimiento. Opta por un detergente suave y específicamente diseñado para ropa de algodón.
- Evita el uso excesivo de detergente o jabón: Utilizar demasiado detergente o jabón puede ser perjudicial para tu ropa de algodón. Utiliza la cantidad recomendada y evita sobrecargar el lavarropas.
- No uses blanqueador: El blanqueador puede dañar las fibras de algodón y provocar encogimiento. Si necesitas blanquear tu ropa, utiliza un blanqueador específico para ropa de algodón y sigue las instrucciones del fabricante.
- No seques tu ropa de algodón mediante centrifugado o secarropas: El centrifugado puede ser un enemigo de la ropa de algodón. Si es posible, cuelga tu ropa de algodón para que se seque al aire libre. Si debes usar el centrifugado o secarropas, elige un ciclo de bajas revoluciones y retira la ropa cuando esté ligeramente húmeda.
- No planches tu ropa de algodón cuando esté húmeda: La plancha puede dañar las fibras de algodón y provocar encogimiento. Espera a que tu ropa de algodón esté completamente seca antes de plancharla.
Conclusión
El encogimiento de la ropa de algodón es un problema común, pero no es inevitable. Siguiendo estos consejos, puedes minimizar el riesgo de encogimiento y mantener tu ropa de algodón en su tamaño original. Recuerda que la prevención es la mejor defensa, así que lava tu ropa de algodón con cuidado y evita el uso excesivo de detergentes, jabones y blanqueadores. El centrifugado puede ser un enemigo de la ropa de algodón. Si es posible, cuelga tu ropa para que se seque al aire libre. Con un poco de cuidado y atención, puedes disfrutar de tu ropa de algodón durante mucho tiempo.